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Creo que no hay mejor día que hoy para hablar del verano, un día estresante, un día agobiante de segundo de bachillerato, hoy más que nunca echo de menos el verano, sol, montaña, amigos, música,siestas... todo aquello que me hace tan feliz.
Ya solo quedan dos meses para que empiece mi verano, y creo que no hay día que no sueñe con él, dice que la vida del estudiante es la mejor, pero para todo el que dice eso le daría un segundo de bachillerato. Verano... tiempo para soñar y para cumplir tus sueños... ya que este curso no me lo permite lo voy reservar todo para el verano.
Sí, es cierto, no todo es bonito en verano, hay tardes interminables, 44 grados a la sombra, vueltas y vueltas en el sofá,niños tirándote tierra a la cara... pero ahora mismo daría lo que fuera para poder estar aburrida. Este verano pasado ha sido sin duda el mejor verano de mi vida, he podido conocer más a fondo los que ahora son mis mejores amigos, hemos ido a la playa, a los sobraos, al 500, a la piscina... he podido disfrutar un año más de un mes junto a mi yaya, y de las benditas fiestas de Teruel.
No hay viernes que no hablemos de nuestro verano en nuestro rato de relax de la semana, luego te das cuenta que te tienes que ir dentro de veinte minutos porque mañana tienes que madrugar porque tienes cuatro exámenes la semana que viene. No tengo tiempo de ver la televisión, y ni escuchando mil veces el anuncio de El Corte Ingles de Sumer time me lo creeré. Y ya no es solo porque viene el verano, sino porque por fin podré decir si todo va bien que soy universitaria y futura directora de empresa, que ya no tendré que agobiarme porque me cierran la puerta del instituto,ni me tendré que recoger antes de salir. Verano, ven, te estoy esperando, no tardes.
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